miércoles, mayo 30, 2007

Madeleine

Me conmueve la noticia de Madeleine la niña inglesa que fue raptada en Portugal, y sobretodo, porque años atrás una amiga mía estuvo a punto de perder a su pequeña en una situación similar.



Ella me contó que fue de comprar un día a un conocido mall con su hija, era época de Haloween y la niña se distrajo mirando las calabazas. Según la madre en cosa de segundos la pequeña desapareció. Comenzó a buscarla por la tienda donde se encontraba y nada, de repente atinó a salir del local y cuando mira hacia el metro divisa a un hombre de la mano de una pequeña igual a su hija por detrás, fue ahí cuando gritó el nombre de la niña, esta se da vuelta y era su hija. Corrió hasta ella, y de impotencia sólo atinó a abrazar a su hija, y llorar desconsoladamente. El hombre desapareció en el instante.


Siempre pensé que un ángel ayudó a mi amiga, porque de lo contrario jamás habría recobrado a su pequeña.


Hoy estos padres viven un dolor muy similar, ojalá recuperen a su hij.a pronto y se haga justicia.

5 Comments:

Blogger elalcaravan said...

ojalá los padres encuentren a su hija, tu amiga igual tuvo suerte.

12:20 a. m.  
Blogger Daniel. Te invito a visitar http://eldeportero.wordpress.com said...

Todo el mundo espera que esta historia tenga un final feliz. Tu amiga tuvo bastante suerte. Saludos

6:10 p. m.  
Blogger -=.H.A.D.A.=- said...

uf!

a una señora conocida, en un supermercado, su niña se perdio un par de segundos de su vista, esta señora aviso a los guardias, cerraron el super y aparecio la chica, pero vestida de hombre y con el pelo corto. esto fue hace unos 5 años atras mas o menos

en fin!

a los niños no hay que perderlos de vista! el jueves estaba en un hospital, un chiquito andaba recorriendo la sala de espera, y su madre solo decia "hijo ven, hijo no salgas, hijo no tan lejos" y todo el rato sentada (bastante lejos del chico). cualquier persona pudo haber salido con el.

en fin!


saludos!!

7:13 p. m.  
Blogger Niña Incógnita said...

A mi también me conmueve mucho lo de Madeleine, sólo nos queda rezar.
La historia que cuentas me deja sin aliento, gracias a Dios, tu amiga tuvo mejor suerte.
Eso me recuerda cuando mi hermano, que tenía unos tres años, se nos perdió por unos minutos en La Serena, gracias a Dios estaba viendo unos juguetes...

un abrazo,

5:10 p. m.  
Blogger RCB said...

En un abrir y cerrar de ojos, uno no se da ni cuenta cuando los ninyos desaparecen del alcance de la vista, más aún si tienes que preocuparte de dos al mismo tiempo. Nos pasó en Estonia con Valentina y casi se nos salió el corazón del susto. Saludos

4:11 a. m.  

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